Medellín.

Desde hace dos semanas, y por 9 días más, me estoy quedando en Medellín. Llegó un momento en que dije basta de calor y basta de viajes y mochilas por un rato. Sabía que Medellín estaba a 1500 mts de altura así que el clima iba a ser ideal. También me habían comentado de la amplia oferta cultural de la ciudad y sabía de su interesante historia política. Después de un par de días en un hostel encontré un departamento amoblado para alquilar. Tenía la idea de alquilar algo más barato en algún barrio de clase media pero solo había amoblados en "El Poblado", la zona más exclusiva de Medellín, donde no solo es caro el departamento sino también el supermercado (1 kilo de queso gruyere está a $ 300), la lavandería (cometí el error de dejar la ropa en la lavandería del apart hotel sin preguntar el precio, me cobraron cerca de $ 200 por una bolsa de ropa, no estuvieron de acuerdo cuando les expliqué que era un robo) y todo.

Así y todo estoy muy contento con el departamento, con tener un placard, una heladera, la tele para ver los mismos espn y fox que vemos en Argentina y un internet que vuela.

Y el departamento está muy lindo.

Con hermosas vistas hacia la montaña...

Y hacia el valle...

Medellín es hermosa, sobre todo cuando uno empieza a subir a la montaña y encuentra en el medio de la ciudad arroyos que bajan hacia el río Medellín que tienen 10 mts a ambas márgenes de naturaleza. Así podés ir caminando por la ciudad y encontrarte este paisaje.

El centro de la ciudad no es muy lindo, la plaza Botero, con sus esculturas y el palacio de la Cultura "Rafael Uribe Uribe" (al parecer el ex-presidente viene de una familia acostumbrada a tener figuras destacadas en la vida pública colombiana y algunas sospechas de vínculos con los paramilitares) son de lo mejor.

El sistema de Metro de Medellín es, me atrevo a decir, el más lindo que vi en mi vida. No es subterraneo sino que va sobre puentes, los coches son modernos y amplios, las estaciones espectaculares y durante el recorrido uno tiene vistas muy lindas hacia ambos lados. Para complementarlo hicieron algunos teleféricos que suben a los barrios que están en las montañas. Fuera de las zonas más pudientes, Medellín está rodeado de villas y cuesta encontrar los barrios de clase media. Las vistas desde el Teleférico son espectaculares. 

Luego el Teleférico se conecta con otro que te lleva directo al Parque Arví, que como se ve en la foto es un bosque natural en la montaña. Increíblemente en apenas una hora de transporte público estás en el medio de la nada. Las fotos desde el teleférico no salen bien por los vidrios.

La estación de Teleférico, en el medio de lo que nosotros llamaríamos "la villa".

Y ahí, en el medio de unos de los barrios que fue de los más peligrosos del mundo, está la biblioteca España, un edificio impresionante aunque para mi gusto medio feo, donde hay una biblioteca muy moderna y linda para el uso público de todo el barrio. Hay varias iniciativas más de estas que se combinan con salas de lectura en el metro, y mucha propaganda oficial a favor de la cultura y la educación. Los índices de criminalidad bajaron bastante en Medellín que fue a principios de los 90`s la ciudad más peligrosa del mundo. Te aconsejan que no te alejes mucho de la estación al caminar por el barrio, pero al menos esas cuadras se sienten pacíficas y los chicos te cuentan orgullosos sobre su biblioteca y demás nuevos espacios públicos, eso sí, luego pasan la gorra. Ahora, estas medidas por si solas, no cambian la desigualdad que hay en uno de los países más desiguales del mundo y donde millones de campesinos son desplazados a la fuerza de sus tierras para liberar terrenos a la explotación minera o al monocultivo. Bastante parecido al norte de nuestro país, solo que las víctimas y desplazados se cuentan por millones. Me sorprendió mucho leer que hay entre un millón y cuatro millones de Colombianos viviendo en Venezuela. Creo que es todo un síntoma. Como lo es también que decenas de miles de Venezolanos de clase media están emigrando a Colombia. 

Una vista de Medellín detrás de uno de los tantos carteles que hay con frases de escritores o promoviendo la lectura y la cultura en general.

Una buena vista de Medellín desde la estación.