martes, 27 de agosto de 2013

Sayulita

En Guadalajara me recomendaron venír a Sayulita que es un pueblo de playa muy lindo en la costa del Pacífico, cerca de Puerto Vallarta. Es una playa con muy buenas olas para el surf así que es un pueblo surfer más. Tiene bastante infraestructura pero no pierde el encanto de pueblo. En esta época del año hace demasiado calor y humedad con lo cual el clima no ayuda a estar muy activo y sumado a que tuve pileta en el hostel dieron como resultado una semana muy tranquila.
Como se ve, apenas caminando 100 metros del centro la playa se empieza a poner desértica, al menos en temporada baja.
La tortuga marina sale a la playa a dejar sus huevos, el humano tarado la ve y se acerca para sacarle una foto porque tiene una cámara malísima con muy poco zoom, la tortuga se asusta y vuelve al mar sin hacer lo que tenía que hacer. Humano tarado es informado por la gente del lugar de lo que pasó y creer haber aprendido la lección.
Cerca de Sayulita está San Pancho. Me habían dicho de esta playa también pero como ya es un pueblo muy chiquito no me la recomendaron para temporada baja. Nos fuimos caminando con Alex y Javi de Barcelona. Fueron alrededor de 2 horas, parte por selva, donde nos perdimos y tuvimos que volver y parte por la playa. En el camino se ven varias playas desérticas hermosas y San Pancho es increíble


Después de una buena caminata al rayo del sol, nos merecíamos sentarnos a comer y tomar algo por unas 8 horas como hicimos. Además era el cumpleaños número 39 de Javi, el de la derecha.

jueves, 22 de agosto de 2013

Guadalajara

Guadalajara es la segunda ciudad de México y tiene alrededor de 7 millones de habitantes. A pesar de ser tan grande es bastante más relajada que el Df o Buenos Aires y en algunas cosas parece más bien un pueblo. El centro histórico es muy lindo y la catedral impresionante. Según me comentaron es la ciudad más conservadora del país y esto se refleja en que por ejemplo, hasta hace unos años la principal cadena de farmacias, que está por todos lados, no vendía condones. Esto en contraposición con el DF donde está legalizado el aborto y el casamiento homosexual muestra el contraste que hay entre una ciudad y otra.
La gente en Guadalajara tiene un aspecto bastante distinto que en el resto del país ya que en esta zona no había una población indígena tan importante y eso hace que se vean rasgos y características más europeas.





 Al crecer tanto la ciudad, como pasa en todas las grandes ciudad, los pueblos vecinos pasaron a formar parte del conglomerado urbano. Uno de esos pueblos es Zapopan donde está esta basílica.
Otro pueblo de los alrededores es Tlaquepaque, que es muy bonito, y como muchos otros lugares de México lleno de galerías de arte y negocios de diseño. Me gustaron varias cosas que vi pero los precios eran una locura.



 A unos 50 km de la ciudad está Chapala, que es el lago más grande de México, rodeado de montañas, es un lugar hermoso. Solía ser, a principios del siglo pasado, el lugar de veraneo de las clases altas y por eso el pueblo tiene varias mansiones impresionantes.


lunes, 19 de agosto de 2013

Real de Catorce.

Ya que estaba en San Luis Potosí, fui hacia el norte del estado para conocer el desierto, ya que ahí empiezan las zonas desérticas de México. Ya en esta zona, al estar cerca de la frontera con USA, es sorprenderte ver que en las carteleras de destinos en las terminales de micros hay casi tantas ciudades Yanquis como Mexicanas, hasta en los pueblos chiquitos salen micros que van diariamente a Houston por ejemplo. México es realmente un país con muchos países adentro y esta zona tiene muy poco que ver con Oaxaca o Chiapas y si bien la pasé muy bien no sentí la misma buena onda que había en el sur. A pesar de no ser de los estados más peligrosos y con mayor actividad del narcotráfico, San Luis Potosí tiene bastantes problemas con esos temas y la presencia militar y policial es mucho más fuerte, y siempre con su arma gigante en la mano lista para ser usada.
También es la zona donde más vi al estereotipo de Mexicano que a uno primero le viene a la mente, todos o casi todos andan con sombreros y se escuchan rancheras por todos lados. Muchas de las canciones tienen temáticas narco así que uno escucha letras en las cuales se habla de granadas, ametralladoras y ese tipo de cosas lindas. Con la música soy todo lo contrario que con las comidas, me gustan casi todos los estilos, pero las rancheras definitivamente no.
Real de Catorce es un pueblo que se construyó en la época colonial alrededor de una mina de plata. Cuando la mina se agotó la mayoría de la población se fue y quedó casi abandonado por muchos años hasta que algunos visionarios le empezaron a ver la veta turística. No es fácil llegar hasta ahí, hay que tomar un micro hasta Matehuala, de ahí otro que te deja en la montaña antes del túnel y uno último más chico para atravesar el túnel de 2,5 km que te lleva por dentro de la montaña hasta el pueblo. Una vez ahí, es un pueblo hermoso, colonial en el medio de la montaña, a 2700 mts sobre el nivel del mar. Tiene unas vistas impresionantes y por los colores de los cerros y lo árido del paisaje me hizo acordar un poco a Purmamarca. Todavía hay dentro del pueblo bastantes ruinas de casas abandonadas ya que llegó a tener 10000 habitantes en la época dorada y ahora ronda los 3000, eso le da todavía un plus más.
Hice una excursión a caballo al desierto que duró 6 horas. Definitivamente he vencido mi miedo a los caballos, si bien "Pingüino" era semi-automático, buena parte del camino era de montaña y luego en el llano me animé a galopar por primera vez en la vida. En un momento el guía me dijo "es un placer hacer esta excursión con alguien que no tiene miedo, muchos turistas se asustan y se ponen insoportables". Miedo yo? de que?...
El primer día subí a la montaña para tener más panorama y ver el desierto, pero no lo encontré. Al otro día hablando con el guía me enteré que esa llanura verde era el desierto, aunque no lo pareciera. Tiene bastante vegetación, no solo una enorme variedad de cactus, entre ellas el peyote, y varios tipos arbustos y flores.












Xilitla.

Xilitla es un pueblo en el estado de San Luis Potosí, al norte de México. Está en una zona turística conocida como la Huasteca Potoseña que es una zona de sierras (en realidad todo México es una zona de sierras), selvas, ríos y cascadas muy linda. Decidí venir no solo por eso, ya que estuve en varios lugares que ofrecían lo mismo y tuve que desviarme hacia el norte, lo cual no estaba en el "plan" original para este viaje, sino porque en este lugar están "Las Pozas de Sir Edward James".
Edward fue un millonario, poeta, escultor y mecenas ligado al movimiento surrealista, era amigo entre otros de Salvador Dalí y "dime con quien andas y te diré quien eres" era también un chiflado, pero uno de los lindos. Resulta que en un viaje a México se enamoró de esta región a la que consideró el Jardín de Edén. Compró unas tierras e hizo una serie de esculturas y construcciones surrealistas en el medio de la selva. Cuando me comentaron sobre este lugar, del cual muchos mexicanos desconocen su existencia supe que tenía que ir. Y no me equivoqué, es de los lugares más increíbles que visité en la vida. Muchas de las construcciones están sin terminar, con los fierros del hormigón a la vista, pero es así porque así le gustaba a Edward, para quién la construcción de este lugar era más que nada un juego. Al recorrerlo no parás de sorprenderte al ir caminando por una selva y de repente encontrar una columna que no sostiene nada en el medio de la naturaleza. Estuve 3 días en Xilitla y dos de ellos los pasé en Las Pozas, caminando y sorprendiéndome. La conclusión es simple, Sir Edward James estaba totalmente loco, gracias a dios que lo estaba. Lamentablemente al tener escasas nociones de fotografía no pude sacar fotos que le hagan justicia al lugar, una persona que sabe de fotografía se hace una fiesta ahí, así y todo volví a superar mi récord de fotos por día. Acá van las mejores...









sábado, 10 de agosto de 2013

San Miguel de Allende.

Pido perdón si ofendo a algún amante de Colonia del Sacramento, pero estar en México te hace dar cuenta que el único motivo por el cual tiene algún interés turístico es porque está en una zona que era totalmente marginal en aquellos tiempos. Tuve que ir ahí a abrir la cuenta en dólares que me permite sacar dinero sin problemas con tarjeta de débito muy poco antes de empezar este viaje. Estamos en veda electoral, es domingo 11/08/2013 a las 02:04 am hora de Argentina y estoy un poco alegre a punto de ir a un bar a mover las cachas, así que no debería mencionar nada que tenga que ver con la política pero no puedo evitar decir que es la primera vez que me pierdo una elección en la vida. Muchos odian ir a votar pero a mi me encanta ejercer mi derecho democrático a elegir a quién me parece el mal menor. Y debo decir que si bien desde la distancia no estoy tan al tanto de todo lo que pasa como lo estaba viviendo allá y leyendo todos los días las dos campanas (en mi caso elegía los que me parecen más serios de ambos lados, La Nación y Página 12) en estas elecciones, por primera vez, no sabría a quién votar. Por un lado, más allá de muchas cosas, que a mi modesto entender se hicieron bien en estos años, entiendo que el ciclo K está agotado. Pero por otro, las opciones que me da la oposición me parecen todas patéticas. No puedo creer que el FAP se haya mezclado con la impresentable de Carrió y varios más. Evidentemente hice este viaje en el momento exacto, no tengo que votar y no tengo que soportar a la prensa meter el dedo en la llaga de la tristeza que significa que mi querido Independiente de Avellaneda no solo haya descendido sino que además pierda la primera fecha del nacional B con Brown de Adrogué. Dicho esto, volvamos al tema del blog que es mi viaje. Decía lo de Colonia porque al ser México el principal virreinato para los españoles (siendo Perú el segundo y el Río de la Plata el lugar donde salía la plata del potosí y nada más) la cantidad de ciudades coloniales hermosas que construyeron es interminable. Hoy estoy en una más, hasta ahora la que más me gustó, pero sería interminable conocerlas todas. La catedral de este lugar es de una belleza indescriptible. A diferencia de San Cristobal y Oaxaca que tenían varios atractivos naturales y arqueológicos en los alrededores por acá solo hay unas termas así que solo voy a estar dos días. Voy a evitar que mi borrachera me haga seguir divagando y acá van las fotos de esta ciudad hermosa.









Distrito Federal de México.

Después de varios meses volví a la gran ciudad. Durante el último tiempo en Buenos Aires, cuando vivía en La reja, entrar a la ciudad era una tortura que me ponía de mal humor casi instantáneamente. Ahora, evidentemente bastante más relajado, disfruté mucho de este otro monstruo, que tiene 10 millones de habitantes más pero que a pesar de eso parece un poquito más tranquilo. Claramente los mexicanos viven a un par de cambios menos que los porteños, aunque los taxistas manejan todavía peor y todo el mundo usa el celular mientras conduce con total impunidad, no sienten ninguna necesidad de poner el manos libres.
Había conocido esta ciudad hace varios años, casi 14 para ser más preciso, y en ese entonces no me había gustado nada. Ahora, un poco porque he cambiado bastante y me gusta todo lo que visito y otro poco porque la ciudad ha mejorado también, me gustó mucho. Los parecidos con Buenos Aires son constantes, en este mundo globalizado todo se parece bastante, y si a eso le agregamos que es un mounstro latinoamericano y que hay muchos argentinos viviendo que se hacen notar, más. Al ver estos parecidos uno valoriza más La Habana, que es tan diferente a todas. Entre las diferencias que noté es que el Df tiene mucha más infraestructura en subtes y autopistas pero también pone mucho más en evidencia las desigualdades sociales. A pesar de ser una de las ciudades más contaminadas del mundo, en esto creo que influye mucho estar en un valle, se ven más intentos de reducir el daño que inevitablemente estas megaciudades le generan al medio ambiente. Buena parte de la iluminación callejera está alimentada con paneles solares, en todos lados hay dos tachos de basura para separar lo orgánico de lo inorgánico, buena parte de los colectivos son eléctricos y los sistemas de alquiler de bicicletas para dejarlas luego en otra parte están mucho más extendidos.
Claro está, que como buen turista recorrí las partes más lindas y cuando me tocó ir con algún colectivo por los suburbios ahí la cosa se pone fea.
Empecemos con las fotos.
Vista desde el castillo de Chapultepec, donde se ve parte del bosque con el mismo nombre que es bastante parecido a los bosques de Palermo, inclusive tiene un lago con botes bicicleta. De fondo se ve la torre mayor que es por ahora, hasta que terminen uno en San Pablo, el edificio más alto de latinoamérica.
El castillo de Chapultepec desde el bosque. Ahí vivieron el emperador Maximiliano de Hasburgo y su esposa Carlota a mediados del siglo XIX cuando intentaron, por segunda vez, hacer de México una monarquía constitucional. También ahí vivieron varios presidentes, hasta que Lázaro Cárdenas - ¿el Perón Mexicano? - lo donó para que sea el museo nacional de historia. No solo las capitales son parecidas, también la historia. Al igual que nosotros, tuvieron guerras entre federales vs. unitarios y entre liberales vs conservadores. No somos nada originales.
Plazoleta en medio del paseo Reforma, toda esta zona no era tan linda cuando estuve la vez anterior pero Carlos Slim (quién se supone que es el hombre más rico del mundo, porque los verdaderos dueños del mundo, ocultan su fortuna y no salen en los rankings de Forbes) está comprando terrenos por esa zona y usando toda su influencia para mejorarla y así ser todavía más rico. Nunca alcanza, siempre quieren más.
                        
 El palacio de bellas artes, muy cerca del Zócalo, en el centro histórico.
El edificio que más me gustó es el palacio postal que es el que está al fondo. Justo al lado del palacio de bellas artes.
Algo bueno que tiene el Df es que no está todo tan centralizado como en Buenos Aires y hay varias zonas céntricas distintas. Esta es otra.
Ruinas y más ruinas. Cerca del Df, a una hora más o menos está Tehotihuacán, que fue contemporánea a Monte Albán, apogeo entre el 300 y el 600 dc, abandono hacia el 900 dc. Según leí tenían mucho comercio entre ellas y había un barrio Zapoteca acá y un barrio Tehotihuacano en Monte Albán, ciudades cosmopolitas si las hay. Estas pirámides son sin dudas las más altas aunque para mi gusto no alcanzan la perfección de Palenque y otras del mundo Maya. Sigo enloquecido con el México precolombino.

El museo nacional de Antropología es Disney para los que nos gusta este tema. Estuve 5 horas pero da para quedarse un día entero. Ver la belleza del arte y las cerámicas de las distintas culturas que habitaron México antes que lleguen, ¿o lleguemos?, los españoles, a mi me abrió la cabeza en mil pedazos. No solo eran los Zapotecas las culturas avanzadas que no conocía, también estaban los Olmecas, los Toltecas y varios más. Nunca en mi vida recorrí un museo con tanto interés y emoción. En la foto estoy con el supuesto, porque no lo es, calendario Azteca. Chiquito no?
 Más fotos del museo.