Cartagena.

Cartagena, en el caribe Colombiano, fue unos de los principales puertos de América durante la época colonial y sigue siendo el principal puerto de Colombia. El estilo arquitectónico es bastante distinto del que venía viendo en Centroamérica y por eso me encantó recorrerla con sus hermosos balcones y la muralla que le da un toque especial.

El calor ya me venía agotando desde hace varias semanas y el tremendo calor que hizo los días que estuve fueron la famosa gota que rebalsó el vaso. A los 3 días escapé hacia la altura de Medellín porque no lo aguantaba más, sino me hubiese quedado unos días más.

Para mantener una continuidad con la entrada anterior, empiezo con una foto desde el velero cuando estábamos llegando.

Llegando a la ciudad amurallada, de fondo se ve la torre del reloj que es la entrada principal.

El hecho de entrar de esa forma le da una magia especial, sobre todo por el contraste de lo que se ve fuera de la muralla y una vez que entrás, es un túnel del tiempo.

Sin dudas, una de las ciudades coloniales más lindas.

No fui a las playas de la ciudad porque me dijeron que no era muy lindas. Pero a solo una hora de viaje, combinando colectivo, mini-ferry y moto llegás a Playa Blanca, en la isla Barú, que es hermosa.

San Blas y viaje a Cartagena.

El archipiélago de San Blas está en el caribe Panameño, más o menos en el centro de Panamá. Consta de 365 islas de las cuales 80 están habitadas por los Gunas y el resto desierta. Toda la comarca de Guna Yala que abarca la franja costera caribeña de Panamá, desde el canal hasta Colombia, tiene una especie de autonomía especial producto de la revolución de 1925. Si bien es parte de Panamá, los Gunas gozan de mayor autonomía que el resto de las provincias Panameñas. Para recorrer este paradisíaco archipiélago tomé un velero que luego de 3 días de paseo por las islas, me llevó a Cartagena.
Los días en las islas me tocaron bastante feos, así y todo se nota que el lugar es espectacular.

El primer día si estuvo bueno, en la isla Chichimé.

La capital de la nación Guna.

Una foto muy representativa de mis días en el velero. Mientras estuvimos en las islas y el mar no se movía mucho era bastante cómodo, luego a mar abierto se hizo bastante incómodo. Esos primeros días batí todos mis records de horas dormidas, el suave bamboleo del velero es una invitación constante. 

Acá se ve el Victory y bajando de el, Adolfo Rodriguez Saa. El decía que se llamaba Carlos y que era Mexicano, pero yo siempre supe que mentía. La primera noche se agarraron todos un buen pedo en la playa. Yo me había ido a dormir temprano y en eso escucho ruidos y llamados. Cuando salí a cubierta, "El Adolfo" estaba en el agua totalmente en pedo y no podía subir, fue muy gracioso ayudarlo.

Tan lindos estuvieron los días que esta foto parece en blanco y negro.

Otra islita.

Los últimos dos días fueron de viaje a mar abierto. Como ya comenté, se hizo bastante incómodo. El mar nos tocó bastante movido todo el tiempo, con olas de 3 metros, con lo cual no había mucho más que hacer que acostarse o leer. En los 5 días que estuve en el mar me leí dos libros, otro record para mi. El velero estaba bien, pero le faltaban algunas pavadas que podían hacer el viaje mucho más cómodo. Principalmente almohadones!!!.
Después de 48 hs de viaje, de la incomodidad, de algo de nauseas al final, Cartagena nos recibió con este amanecer.

Bocas del Toro.

Bocas es un pueblito del Caribe Panameño situado en la isla Colón que forma parte del archipiélago de Bocas del Toro. El pueblo es muy bonito, sobre todo visto desde el mar ya que las casas que están sobre la orilla tienen muelles y partes directamente sobre el agua. Al verlo, el caribe parece una laguna con algunas montañitas de fondo, solo en algunas partes ves mar abierto. A pesar de ser un destino turístico internacional logra mantener algo de identidad de pueblo y panameña. De los pueblos de playa caribeños que conocí es el que más me gustó.
Hay mucha gente de varias partes del mundo trabajando ahí, especialmente Españoles, Catalanes (para que no se enojen...) y Argentinos. Según me decían los locales a fines de Diciembre empieza la invasión de los "cheboludos" y dura hasta febrero. Cuando pregunté como eran los "cheboludos" me dijeron, "son buenos, pero se quejan por todo". 

Panamá es de todos, el país donde peor me atendieron, muchas de las personas que atienden al público son antipáticas a un nivel que se convierte en algo muy gracioso. Tranquilo irmao reloaded. 

Me acabo de dar cuenta que nunca hice la aclaración que irmao en portugués se escribe con un acento en la a que es igual al de la ñ pero no encontré como hacerlo y tampoco tuve muchas ganas de investigar.

Las playas que están cerca del pueblo son lindas pero sin la espectacularidad que uno espera del Caribe. Pero ya haciendo excursiones se pueden conocer algunas playas increíbles.

Me quedé 12 días porque me tocó engriparme por primera vez en el viaje. En realidad no fue una gripe porque no llegué ni a tener fiebre, pero me sentía un poco mal y fue una buena excusa para quedarme los primeros 5 días todo el día en el hostel leyendo, tocando la mbira y haciendo nada.

El Hostel en el que estuve esos días ayudaba porque tenía pileta con vista al mar y un muelle hermoso. Además te daban Kayak gratis, parecía un resort pero a 12 dólares la habitación compartida.

Después llegó el fin de semana largo por la independencia de Panamá y como estaba todo reservado me tuve que ir a un hostel en el pueblo, mucho más incómodo pero con un lindo muelle también, donde me quedé el resto de los días y desde donde hice las excursiones.

Vista de la pileta desde el Hostel/Resort Pukalani. 

Este es el muelle más desaprovechado del mundo, no tenían hamacas, ni siquiera un sofá. Estuve indignado, una persona convaleciente como yo necesita una hamaca, y si bien la tenían, estaba mal ubicada.

La playa Estrella, estaba llena de estrellas de mar bastante grandes. La parte principal estaba lleno de puestos de comida, gente y reaggeton. Pero alejándote un poquito encontrabas estas playitas.

vista de bocas desde el agua.

El cayo Zapatilla, de las playas más lindas que vi en el viaje. Se va en una excursión donde antes ves delfines y hacés snorkel en un coral chiquito pero donde aparecen algunos de los amigos que aparecían en Playa Ancón, Tulum y Roatán. Y al final te llevan a esta islita hermosa, que es un parque así que está desértica y se puede dar la vuelta en 45 minutos. 

Caminando por cayo Zapatilla sentí muy clara la diferencia de emoción que me causaba esta playa tan hermosa con lo que me causaban Guardalavaca, Cayo Guillermo o Tulum al principio del viaje. Y ni hablar de Mazunte o Chacahua que tal vez no eran tan hermosas pero fue donde mejor la pasé. Al pasar los meses el viaje se va convirtiendo en rutina, una rutina muy linda y recomendable, pero rutina al fin. 

La playa de la rana roja (si van a Bocas pregunten por Red Frog Beach) es también paradisíaca y fuera de temporada está casi vacía. En la playa de al lado que debe ser igual de hermosa hay un resort que debe estar muy bueno porque es en el medio de la nada. Del lado de los pobres hay un eco hostel del tipo que estuve en Ometepe que de haberlo descubierto antes hubiese ido. Se llama "El Palmar Lodge".

Un poco más de esta playa.

Y la rana roja, que los chicos de la zona capturan y te cobran un dolar por foto.

La vista desde el Hostel en el que estuve los últimos 7 días.